Hoy ya casi nadie duda el verdadero sentido del golpe: transformar la estructura socio-económica del país para "insertarlo" en la nueva realidad internacional, es decir, aplastar al pueblo y concentrar la economía.
Rodolfo Walsh ya lo sintetizó en su magistral carta:
Estos hechos, que sacuden la conciencia del mundo civilizado, no son sin embargo los que mayores sufrimientos han traído al pueblo argentino ni las peores violaciones de los derechos humanos en que ustedes incurren. En la política económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada.Sin duda, el golpe cívico-militar fue el inicio de la inclusión de nuestro país en el modelo neoliberal, previo paso de "ablande" por el rodrigazo. Aquí y aquí un par de documentos breves e interesantes al respecto.
Esta tarea sería luego finiquitada y legalizada por Alfonsín y profundizada hasta el tuétano por Menem. Pero eso ya es otra historia.
Memoria, Verdad y Justicia.
Juicio y Castigo.
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