No es que llame la atención.
No es que sorprenda.
No esperábamos otra cosa.
Pero no es bueno dejarlo pasar.
sigue...
"Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo, oralmente. Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando. Millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror. Haga circular esta información."R.Walsh
Pequeño apunte para debatir lo acontecido con la
El 16 de septiembre de 2.007 fue un gran golpe al proceso de concentración política e institucional al que se denomina de ordinario “rozismo”.
El principio del fin, probablemente. Aunque en política el fin solo se puede certificar cuando realmente acontece. Valga la digresión: se pronosticó el fin de la era Kirchner en junio, y el kircherismo asestó varias acciones políticas magistrales inclusive una de las leyes mas importantes desde 1983 para acá como la de medios, demostrando que está vivito y coleando.
Preferiría “Puntos de Inflexión”.
Pudo haber otros si el Gobernador Capitanich impulsaba, por ejemplo, algunas de las medidas comprometidas en campaña como avanzar con la destitución de jueces o denunciar penalmente a funcionarios (Ir)responsables. Pudo haber otros puntos de inflexión mas imperceptibles.
Pero claramente hay dos puntos de inflexión además de aquel 16/09/07: el resultado electoral del 28 de junio que consagrara claramente la victoria del
Las ¿tres? vidas
La sabiduría popular le asigna 7 vidas al gato.
Sin lugar a dudas el rozismo tiene por lo menos 3 vidas. La anterior al 16 de septiembre que lo vio en la cúspide del poder institucional y financiero; La posterior, de la que sobrevivió con un fuerte operativo retirada que le dio oxígeno financiero y legitimación política interna y merced al gesto del ARI chaqueño que le dio oxígeno político quitándoselo a sí mismo; Y la posterior al 28 de junio, de la que sobrevivió por los errores y torpezas cometidos por el propio
Esta tercera vida política finalizó entre el 1 y el 3 de diciembre.
¿Habrá otras?
La voluntad popular
Un proceso político comienza su proceso de descomposición cuando se olvida de los elementos que lo fundaron. En el caso que nos ocupa, el rozismo se pretendió inscribir en una suerte de “progresismo” que resistió el avance del neoliberalismo. Enarbolo banderas de lo federal, la transparencia, lo nacional y popular y la defensa del patrimonio estatal. Abrió
Esas banderas fueron cayendo de a una mientras se solidificaba su líder al lado de una camándula de adulones.
Los harapos de la última bandera cayeron cuando
¿Está bien o está mal que
No tengo la respuesta.
Lo cierto es que el
Los intentos esforzados y casi desesperados del Gobernador de evitar una crisis institucional que, intuía, perjudicaría a su propio gobierno lo hicieron ir mas allá de lo conveniente. Aquella foto con el responsable de muchas penurias chaqueñas que de ninguna manera se interesaba por la gobernabilidad fue nefasta.
Pero no se le puede adjudicar al Gobernador falta de diálogo y búsqueda de soluciones.
Probablemente el devenir de las consecuencias políticas del acceso de Bergia
Muchas veces, los mejores pasos no son hacia delante. Muchas veces los mejores pasos son hacia atrás o hacia el costado.
Compañeros del Ejército de los Andes: ya no queda duda de que una fuerte expedición española viene a atacarnos, sin duda alguna los gallegos creen que estamos cansados de pelear y que nuestros sables y bayonetas ya no cortan ni ensartan; vamos a desengañarlos.
La guerra se la tenemos que hacer del modo que podamos, si no tenemos dinero, carne y un pedazo de tabaco no nos ha de faltar; cuando se acaben los vestuarios nos vestiremos con las bayetitas que nos trabajan nuestras mujeres y si no, andaremos en pelotas como nuestros paisanos indios. Seamos libres y lo demás no importa nada. La muerte es mejor que ser esclavos de los maturrangos. Compañeros, juremos no dejar las armas de la mano hasta ver el país enteramente libre o morir con ellas como hombres de coraje.
Jose de San Martín